20.11.06

Aniversario

Berta era la mujer que había permanecido junto a él durante los últimos catorce años. No sabía muy bien como había surgido aquella historia pero se le antojo que ella había aparecido de repente para llenar su vida de alegría aunque en realidad lo suyo había surgido a fuerza de soledad y horas de trabajo. Fue una tarde, a la salida del trabajo cuando, sin saber muy bien por qué, sintió el impulso de besar a Berta. Ella, cansada de esperar durante años a su gran amor, le abrazó y así siguieron besándose con los ojos cerrados. Y así habían pasado los años, con los ojos cerrados.

Después todo fue muy rápido, la boda, la casa en común... Y ya habían pasado catorce años. Catorce años de vueltas juntos a la salida del trabajo. Catorce años de sopa para cenar. Catorce años acostándose juntos, ya por instinto cada uno a un lado de la cama.
Catorce años desde aquellos primeros besos.

Como cada ocho de abril desde hacía catorce años Sergio volvía solo a casa. Celebraban su aniversario y a Berta le gustaba adelantarse.
“No sé porqué lo he hecho, sólo sé que estoy muy cansada. Lo siento...” era todo lo que quedaba de Berta cuando Sergio llegó a casa. Descompuesto dejó caer la nota mientras, con una rosa roja en la mano, saltaba por la ventana.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Que historia más triste. ¿No había un final algo menos trágico, sin suicidio de por medio?

Sandman dijo...

Es difícil hacer sentir tan mal con tan poco. A mi me gusta. no deja de tener su mérito la cosa.

Edda dijo...

Vaya... os he llenado de tristeza.. ya lo siento. Venga, otro día os pondré algo más alegre, vale? Al menos lo intentaré.